Criogenizador de discos duros

Fuji ha decidido no producir más película negativa para cámara. Juro que no lo esperaba tan pronto. Parece muy cercano el imperio de la memoria efímera del cine digital.

¿Cuándo tendremos los cinefotógrafos un formato estándar y duradero en el cual confiemos? Son decenas de formatos digitales los que hemos probado en los últimos diez años y todos tienen el problema del Nexus 6; condenados a su muerte por su propio creador; muertos desde que se diseña la estrategia de marketing.

Pongo el ejemplo de la cámara 5D de Canon: su primer modelo ya podía hacer lo que hace su recién lanzado Mark III pero la marca sólo le dejó algunas funciones abiertas al usuario (ej. Grabar video 30p en Mark I; grabar video 24p en Mark II; espejitos por oro) para poder vendernos cada año un nuevo equipo. Ésto queda claro cuando los chicos de MagicLantern hicieron un firmware gratuito que desbloquea las funciones que Canon nos va ofreciendo a cuentagotas y que los cinefotógrafos, que usamos este tipo de cámaras, necesitamos (balance de color numérico que cubre todo el espectro; cuadros por segundo variables; intervalómetro; slow shutter; HDR; grabación de clips ininterrumpida; programación de foco variable; osciloscopio; vectorscopio; focus assist; zebra...)

Por otro lado, hemos implementado muchas rutas críticas de post digital y me siguen llegando invitaciones a seminarios para nuevas rutas de nuevas cámaras y demás minucias que cuando crees que ya comprendes son obsoletas.

Cada marca de cinefoto digital tiene su propio mercadeo con sus propios codecs o variaciones de un mismo algoritmo; la adquisición y procesamiento de datos (perdón, quise decir IMAGEN), se parece cada día más a la industria farmaceútica; venden el mismo medicamento con nombres distintos y pequeñas variaciones a la molécula, a precio de oro, ocultando ventajas conocidas en el presente para venderlas mañana como una novedad.

Hoy parece más importante para muchos cinefotógrafos conocer todo sobre los "fierros" que sobre el guíon que vamos a fotografiar y luego a grabar en el formato digital que el presupuesto pueda darnos.

Hoy parece más rentable vender manuales de operación o cursos de capacitación, que nuestro propio oficio de cinefotógrafos.

No me opongo al avance de tecnologías que nos ayuden a comunicar mejor nuestras historias; tampoco me opongo a los avances de la medicina. Me opongo a que nuestro gremio sea utilizado para legitimar las estrategias de mercado de las marcas que hoy ya saben cuál será el estándar del mañana. Me opongo a tener que invertir miles de dólares al año en equipos de registro fotográfico que pueden durar diez veces más. Me opongo al imperio de los soportes efímeros que fomentan el consumo absurdo.

Pronto inventarán un criogenizador de discos duros. Y cuando haya suficientes discos congelados, nos venderan la versión 10.5.0456 Beta del descriogenizador que garantiza recuperar el cien porciento de tus pixeles.

Hoy deseo que mis colegas y yo no olvidemos que el cine es lenguaje y no sólo un soporte... Demasiado efímero para acabarla de chingar.